QUÉ VAMOS A HACER

La cabeza se ostiga de vos. Hay un par de miedos que palpitan como las estrellas o el corazón o el sexo. El primero es no cumplir un sueño mío que me acerca a tus territorios y el segundo es no ser para vos lo que sos para mí. Que vamos a hacer entonces. Si necesito de tu boca como necesito de tus ojos, como necesito de tu lengua, de tus pensamientos, de tus sueños, de tus deseos, de tus historias, necesito de vos como de tus silencios. Me apagas los ojos y no necesito ver demasiado cuando te tengo, quiero apretarte hasta meterte junto lo que tengo adentro, que corras por mi sangre como vitamina, que me des vida con lo que me das, hacer poesía con tus lenguajes, hacer arte con tus dedos, olvidar que mi cabeza se ostiga lentamente y se cansa de pensar en grises. Pienso en colores con vos, me pinto de óleos vivos, me das alegrías sin condiciones, y me entristeces las melancolías para bien.