Diccionario

El ser humano no fue tan sapiens como arrogantemente se definió, por eso no hay que estudiar para aprender, hay que estudiar para desaprender. Porque por la paz no se vota, la paz se es, así como cualquier guerra es la envidia enfrentada. Porque el dinero es solo el simbolismo del intercambio y el amor y el odio son la misma cosa, por eso hay que intercambiar más para ser más rico y hay que tenerle más miedo al miedo que al odio. Porque la idea de familia no empieza con la sangre, si empezara con la sangre la gente no comería carne, la idea de la familia empieza con la vida, la sangre es una idea nazi. Porque los amigos al menos no son para siempre y las parejas son socios que no se unen necesariamente para proyectos de toda la vida. Porque el amor es solo un estado de gozo, así como el trabajo lo pagan no por maluco sino porque es una forma de dar las “gracias”. Porque la ignorancia siempre culpa, copia y critica. La genialidad inventa y resuelve. Porque no es que las cosas estén al revés, las cosas simplemente todavía no están listas. Porque humanidad es una palabra que todavía no nos merecemos, pero está bien que al menos queramos serlo. Porque nadie tiene la culpa de las desgracias y tampoco diré que el culpable es uno, simplemente no hay desgracias tan significativas, solo es un microevento en un universo de millones de años. Porque no creo que esta sea una posición optimista, simplemente es lo más parecido a una verdad evidente. Porque todo lo que hemos maldefinido no es culpa de quien lo definió, si no de quien sigue usando el mismo significado. Porque si somos honestos, lo mejor que podemos hacer es pasar por el mundo dejando la menor huella posible, para pedirle perdón a tanto caos. Porque la pobreza empieza con la frase “si el Estado hiciera…” y la riqueza empieza por creer en los propósitos. Porque el problema del feminismo no es que no nos reconozcan como iguales, es que en principio no somos iguales y no hay nada tan admirable en eso como para querer serlo. Hay mucho por hacer, pero hay pocos que quieran hacerlo. Hay muchos significados complejos en los diccionarios de la gente, cuando si nos sentamos a observar las cosas, entendemos el origen, la verdad, el ombligo, la etimología de lo que llamamos vida y así no nos inventamos tanto, ni nos creemos tanto, más indispensables son las abejas, el polen y las flores, que nuestra minúscula presencia en el mundo. Porque ya es hora de que busquemos nuestras propias verdades y dejemos de confiar en las mediocres definiciones que nos inventamos, para demostrar que para ser sapiens hay que empezar por ser homo y para ser persona hay que empezar por ser universo.